ENCUENTROS EN LA TERCERA FASE



Sábado por la tarde
Leroy Merlin
P. y yo mirando calefactores
Señor que empieza a hablarnos efusivamente
Me giro...
El padre de P...
Sigue hablando efusivamente y con una amabilidad casi insultante
Se acerca su madre
Un muro
No me mira a los ojos
Hasta que descubre que soy un ser humano y no un mostruo
Me mira dos veces
El padre no para de hablar de un accesorio para el baño
Sonríe mucho, demasiado
Es la primera vez que estamos juntos en 12 años
Me dice que vaya a su casa a comer, que han cometido errores, pero el pasado es el pasado
Se le empañan los ojos...
A pesar del rencor, me conmuevo
La madre sigue como una roca, infranqueable
Se marchan por fin
Y P. y yo nos quedamos en estado de schok
Hubiera preferido encontrarme con un alienígena

Comentarios

  1. Para ellos el alienígena eres tú.

    Saludos

    ResponderEliminar
  2. Vaya una situación. Por lo que leo, el padre está por la reconciliación y la madre, no. Menudo panorama. ¿Irás a comer? ¿Reunirás el humor para hacerlo? ¿Llevarás spray de pimienta?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Juli, me parto con lo del spray de pimienta, jajaja! Es una gran sugerencia... ¿Tú qué harías? ¿Irías a la comida? ¡Un fuerte abrazo!

      Eliminar
    2. Tendría que conocer a tus funestos suegros. Los míos me quieren y mi pareja tiene la, diremos, suerte de no tener suegros. Tuvo suegro, mi padre, y se llevaba bien con él. Trabajo de cara al público y normalmente sé tratar a la gente. Soy una tía simpática, es uno de mis pocos dones, pero si tus suegros, o más bien, tu suegra, son mal público...¡Que te sea leve si vas! Un beso.

      Eliminar
  3. Joer que situación más incómoda. Yo no tengo claro si iría, por un lado a lo mejor lo P. Me esfuerzo, pero por otro lado pienso..... huye insensata!! Que estarías a su merced en su terreno.
    Ya nos contarás la decisión
    Muackis

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola Zhura! Eso me pasa a mí exactamente, que me debato entre ir o no ir, y lo de estar en su terreno no me hace ni pizca de gracia... ¡Un fuerte abrazo!

      Eliminar
  4. Sabes, siempre he pensado que hay pocos rencores que sean tan fuertes como para aguantar un buen gesto. Lo he vivido con personas de mi familia y sentir que todo ese cieno se disipa, de pronto, es una sensación tremenda de alivio, porque odiar pesa. También da un poco de miedo, te sientes expuesto, con la sensación de que pueden volver a herirte en cualquier momento. Yo iría a esa comida, pero sin esperar milagros.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola Gerardo! Tus palabras me llegan... Creo que tienes razón y tu argumento es aplastante. Ummmmm, pero me cuesta que no veas superar todo el dolor. ¡Un fuerte abrazo!

      Eliminar
    2. ¡Perdona Gerardo! El "veas" es en realidad un "pueda". Me refiero a que me va a costar mucho superar el dolor

      Eliminar
  5. Pues que quieres que te diga, yo iría¡ Ole pareado! a veces por malos entendidos, por esquemas mentales carcas o vaya usted a saber, se crean en la familias unas fobias y rencores que se van encallando y luego limar eso cuesta Dios y ayuda. Te lo digo desde la experiencia de tener una familia numerosisima con ideologias y filosofias de vida totalmente opuestas de cada uno de sus miembros. Afortunadamente tenemos varias "piedras pomez" que consiguen que las durezas no se hagan callo. Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Muchas gracias por tus palabras, Pura! Me llenan de fuerza y esperanza. Pero, como le decía a Gerardo, no sé si voy a ser capaz de superar todo el dolor que me han hecho sentir durante la última década. Veremos... ¡Un fuerte abrazo!

      Eliminar
    2. Claro que si lo vas a superar, y ellos se van a dar cuenta, que es una pena no haber disfrutado de ti y de su hija desde el principio de vuestra relación. Un abrazo.

      Eliminar
  6. Evidentemente la decisión es tuya... Pero opino como Gerardo y Pura; el odio pesa, y responder al acercamiento creo que, pese a lo duro que es, a la larga es un alivio mayor...
    Eso sí, la incomodidad de la situación no te la quita nadie, al menos al principio! Mucho ánimo!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Gracias por tus palabras, Marta! Me parece una gran recomendación que quizá siga. ¡Un fuerte abrazo!

      Eliminar
  7. Te animo a ir, por P y por ti. No tienes nada que perder y todo por ganar. ;-)



    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Gracias Blau! Eso de que no tengo nada que perder... Salud psíquica, quizá... ¡Un fuerte abrazo!

      Eliminar
  8. Madre mía, que situaciones...
    hay que valorar si vale la pena ir, si lo dijo de verdad o por decir... pero bueno, quizá si que se avanza algo... mi madre tardó 13 años en aceptarme, así q quiza ellos también se han tomado su tiempo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola Nosu! Trece años... No sé qué mierdas le pasa a la gente en la cabeza. Qué duro y qué injusto. Un fuerte abrazo.

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

DÍA MUNDIAL DE LA FILOSOFÍA

MONTAIGNE Y LA MORALIDAD DEL SUICIDIO

CENUTRIO