Entradas

Mostrando entradas de junio, 2018

LA CONVERSACIÓN

Imagen
Era importante para mí que la conversación no tuviera lugar en casa de mis suegros. Una comida allí hubiera sido agónica y muy indigesta. Así que le pedí a P. que, por favor, lo organizara para que vinieran a la nuestra por la tarde y, como mucho, merendar algo. Tras un pequeño tira y afloja, P. aceptó.  Vinieron un sábado por la tarde. Les enseñamos la casa; en más de diez años de relación, no la habían pisado. Les gustó, o eso nos dijeron. Fuimos al salón y nos sentamos en torno a unos sándwiches.  P. y yo nos habíamos preparado concienzudamente para coger las riendas del asunto e impedir que nos hipnotizaran con su verborrea recalcitrante. Pero no sé lo que pasó… De pronto y con una habilidad inusitada, le dieron la vuelta a la tortilla y en vez de llevar P. y yo el ritmo de la conversación, lo acapararon ellos por completo. Otra vez tuvimos que aguantar sus anécdotas imposibles, sus relatos exagerados y los aburridos detalles que a nadie le importan en absoluto.  Y